Por Javier Vaca
El Club América ha escrito una página brillante en su historia reciente al conquistar un histórico tricampeonato. Este logro sin precedentes en torneos cortos ha generado un gran revuelo en el fútbol mexicano y ha puesto en el centro de la conversación el trabajo de su director técnico, André Jardine. Santiago Baños, presidente deportivo del club, ha revelado en una entrevista con Claro Sports las claves del éxito del estratega brasileño y lo que lo diferencia de sus predecesores, Santiago Solari y Fernando Ortiz.
Santiago Baños, en entrevista con Claro Sports, reconoció que la llegada de Andrés Jardines fue muy importante para el América, ya que con otros entrenadores como Santiago Solari o Fernando Ortiz no se tenía un repunte importante en la liguilla. “Entendimos cómo se debía jugar la liguilla y hay que señalar que los tres campeonatos tan solo hemos perdido un partido en este tipo de instancias, ese quizás es el secreto de Jardines para el éxito”, señaló el presidente deportivo del América. Esta declaración revela un factor crucial: la capacidad de Jardine para preparar al equipo y afrontar las instancias decisivas del campeonato, algo que no se había logrado con los anteriores entrenadores.
Una de las principales diferencias que señala Santiago Baños entre Jardine y sus antecesores es la mentalidad y la estrategia implementada en las fases finales del torneo. Con Solari y Ortiz, el América mostraba un buen desempeño en la fase regular, pero se desinflaba en la liguilla. Jardine, en cambio, logró transmitir al equipo una mentalidad ganadora y una estrategia efectiva para afrontar estos partidos decisivos. El dato de haber perdido solo un partido en las tres liguillas que culminaron en campeonato es contundente y refleja el impacto positivo de Jardine en este aspecto.
Tanto Santiago Solari como Fernando Ortiz implementaron estilos de juego distintos en el América. Solari se caracterizó por un juego más posicional y de control, mientras que Ortiz apostó por un estilo más vertical y dinámico. Sin embargo, ambos entrenadores compartieron un mismo destino en la liguilla: la incapacidad de llevar al equipo a la consecución del título. Esto demuestra que, más allá del estilo de juego, existía un factor que impedía al América trascender en las instancias finales.
Santiago Baños no profundiza en detalles específicos sobre la estrategia de Jardine, pero sí enfatiza la importancia de haber “entendido cómo se debía jugar la liguilla”. Esto sugiere que el técnico brasileño logró adaptar su estrategia a las características de cada rival y a las exigencias de cada partido en la fase final. Esta capacidad de adaptación y la implementación de una estrategia efectiva parecen ser claves en el éxito de Jardine.
El tricampeonato del América no es solo un logro deportivo, sino también un hito que marca una época en el fútbol mexicano. El equipo ha demostrado una gran superioridad y una mentalidad ganadora que lo han convertido en un referente. Este legado en construcción no solo se debe al trabajo de Jardine, sino también al esfuerzo de jugadores, directiva y afición.
Tras el éxito obtenido, la continuidad de André Jardine al frente del América parece asegurada. El club apuesta por un proyecto a largo plazo con el técnico brasileño, buscando consolidar un estilo de juego y seguir cosechando títulos. La confianza que ha depositado la directiva en Jardine se ha visto recompensada con creces y se espera que este sea el inicio de una etapa aún más gloriosa para el americanismo.
Las declaraciones de Santiago Baños no solo revelan las claves del éxito de Jardine, sino que también transmiten un mensaje de reconocimiento y agradecimiento hacia el trabajo del técnico brasileño. Baños destaca la importancia de su llegada y el impacto positivo que ha tenido en el equipo. Este reconocimiento público refuerza la confianza en el proyecto y fortalece la relación entre directiva y cuerpo técnico.
En conclusión, las palabras de Santiago Baños revelan un factor crucial en el éxito del América: la capacidad de André Jardine para afrontar las liguillas con una mentalidad ganadora y una estrategia efectiva. Este factor, que no se había encontrado con Solari ni con Ortiz, ha sido determinante para la consecución del histórico tricampeonato y consolida al América como un equipo de época.
21/12/2024
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